Ir al contenido principal

¿Quién soy?

 La pregunta del millón. ¿Quién soy? Jamás he logrado dar una respuesta que me convenza y probablemente nunca lo haré, sin embargo, una aproximación sería la siguiente:

Mi nombre es Rosa María Quijada Araujo, tengo 24 años de edad, nací el 29 de septiembre de 1998 en Hermosillo, Sonora, soy la tercera de cuatro hermanos y la primer mujer. Mi papá es Carpintero y mi mamá es secretaria de una escuela primaria, a punto de jubilarse. Tengo una relación de noviazgo de casi cuatro años, pero conozco a mi novio desde hace más de 10 años. Estudié 3er año de preescolar en el kinder María Teresa Pérez Moreno, mi escuela primaria fue Teodosio Navarrete García y mi secundaria la Técnica no. 66, todas en la Colonia Solidaridad dónde también residí toda mi vida. Mi preparación en la escuela media superior fue en el Colegio de Bachilleres, plantel Reforma, dónde tomé la capacitación para el trabajo de Comunicación y así rectifiqué que era lo que quería estudiar de manera profesional. Actualmente estoy en onceavo semestre de Ciencias de la comunicación de la Universidad de Sonora, campus Hermosillo.

 

Desde mis 5 años hasta los 16 sufrí de una infección crónica de las vías urinarias por E. Coli. Sin embargo, al principio no sabíamos qué era lo que tenía, fue hasta los 8 años que descubrimos el problema. Esto me ocasionó estar internada en pediatría en muchas ocasiones, con temperaturas de 40° y molestias hasta para caminar. Muchos estudios, piquetes y madrugadas después, fuimos capaces de controlar la infección y casi desaparecerla. Ahí conocí y conviví con muchos niños que estaban internados por diversos motivos, algunos pasajeros y otros que visitaban el hospital más constantemente por tratamientos de enfermedades graves. Aprendí a valorar mucho más la salud a raíz de ello. A los 17 años fué la última prueba positiva, sin embargo, no he sido dada de alta por prevención y observación y después se atravesó la pandemia, pero espero ansiosamente el alta formal de esa etapa tan cansada de mi vida.

 

He tenido estudios informales varios. Desde muy pequeña me gustaban las manualidades, la costura, la repostería, bordar y tejer, entre otras cosas, pero tomé cursos de teatro y danza en distintos centros y compañías. A los 10 años fuí parte del ensamble de "El mago de Oz" en la compañía de teatro musical del mismo nombre. Durante la preparatoria fuí parte del grupo representativo de danza folklórica y hoy en día frecuento, en la medida de lo posible, los teatros y presentaciones artísticas. Estas habilidades aportan hoy en día a mi perfil como estudiante de educación.

 

Durante la primaria y secundaria disfrutaba de escribir. Muchas de las cosas que escribí fueron sólo pequeños relatos en hojas individuales que terminaron por perderse, sin embargo, durante el segundo año de secundaria me decidí a entrar a un concurso. Lamentablemente, el apoyo y motivación que tuve no fueron los adecuados y una frase de mi profesora bastó para que desechara completamente la idea de escribir (hoy en día lamento haber renunciado a ello tan fácil, pero he intentado retomar la costumbre).

 

Siempre sentí curiosidad por la Lengua de Señas y fué durante la preparatoria cuando tuve la oportunidad de aprender y estudiar este idioma. Aprendí mucho de la cultura sorda y de la comunidad sorda y día a día procuro aprender más para poder ser de ayuda a quien lo necesite. Estudié un nivel en la preparatoria (tenía compañeros sordos y los maestros que los asesoraban nos facilitaron clases a quienes las deseábamos), tuve la oportunidad de seguir en un curso impartido por el Seminario mayor de Hermosillo, dónde antiguos maestros y compañeros de clase eran los profesores y más recientemente estudié en un curso que facilitó la Secretaria de educación para sus maestros, personal y familiares, este curso tendrá continuidad próximamente y espero poder culminar esta formación, estoy en espera de la siguiente convocatoria.

 

Pertenezco a la religión católica y soy servidora de mi comunidad desde los 12 años siendo catequista. He tenido varios servicios, pero actualmente soy la coordinadora de catequesis en mi capilla, así como del grupo de economía para la construcción del templo (hace tres años era un tejaban y hoy ya tiene paredes, techo y suelo) y en mi parroquia soy la coordinadora de la pastoral de comunicación, parte del consejo parroquial, apoyo del grupo de jóvenes y parte de un grupo de peregrinos para la jornada mundial de la juventud que se hará en el 2023 en Lisboa. Mi servicio en mi comunidad religiosa es una parte grande e importante en mi vida, pues en ella he crecido mucho personal y espiritualmente, pero también he tenido la oportunidad de crecer y obtener experiencia profesionalmente, pues constantemente recibimos cursos de pedagogía, psicología, doctrina social, prevención de accidente entre otras cosas y sobre todo mucha experiencia en el trato con las personas y los niños por la catequesis.

 

Comentarios

  1. Me encanta tu blog, su contenido demuestra el excelente trabajo que realizas, lo que haces y hasta donde quieres llegar. Excelente

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

¿Dónde me encuentran?

 Mis redes sociales son la mayor fuente de contacto que tengo, a pesar de que son públicas, no suelo colocar cosas muy personales, pero reflejan completamente lo que me gusta, mis intereses y lo que me rodea. Facebook: https://www.facebook.com/rosa.m.quijada.1 Instagram: https://www.instagram.com/rosaquijadaa/ Twitter: https://twitter.com/RosaQuarM Gmail: rosa.sw.qar@gmail.com   Whatsapp: 6621245423

Mi plan de vida y mi experiencia

  Plan de vida: Mi pasado: No estoy segura del momento exacto en que decidí estudiar comunicación. Cuando era pequeña, siempre deseé ser maestra. Me entusiasmaba la idea de poder enseñar y transmitir lo que yo sabía pero en algún punto mi deseo cambió. Sin embargo, puedo recordarme entusiasmada viendo programas que tal vez a otros niños no les gustaban, como bizbirije, 31 minutos y hasta las noticias. Por lo que en la preparatoria elegir la opción de comunicación y eventualmente la carrera pareció ser lo correcto. Todas las materias eran de mi agrado y ciertamente el periodismo me entusiasmaba, así como la radio y el audiovisual. Pero al final mi niña interior ganó, pues cuando se dió el momento de decidir, supe que mi lugar era la rama educativa. Las materias optativas que tomé fueron: comunicación y Lenguaje escrito, producción de campañas publicitarias, políticas públicas en educación educativa, innovación educativa, multimedia educativa y educación en línea.   ...